Parece que la selección española de fútbol no levanta cabeza desde su estrepitoso mundial de Brasil.
Se pedían cambios después de dicho mundial y más viendo que una generación de jugadores se jubilaba. Pero el seleccionador, Vicente del Bosque, tan cuestionado por muchos aficionados, se mantuvo en su cargo. Normalmente cuando se acaba un ciclo y por tanto, se empieza otro, lo normal sería cambiar al "jefe". O sea, el seleccionador. De puertas adentro y de puertas afuera, no parece que Del Bosque sea el jefe que necesita esta selección. Del Bosque, aún confía en la vieja guardia (Casillas, Diego Costa, Iniesta, Ramos, Piqué...) y le cuesta confiar en los nuevos (Cazorla, Alcácer, Montreal, Thiago...).
La tendencia es clara, Del Bosque terminará yéndose, pero en lugar de irse al final del Mundial, se irá a mediados de la clasificación para la eurocopa.
Hoy, ha perdido contra una selección pequeña como es Eslovaquia. Veremos la paciencia que tiene la Federación.
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